Cuando el sol se esconde, la imaginación comienza a deslizarse por sombras que derivan en la oscuridad más absoluta y la luz del día huye despavorida de la faz de la Tierra.
Después del anochecer es, en definitiva, el momento del día perfecto para Stephen King.
En Después del anochecer Stephen King reúne una colección de catorce relatos tan asombrosos como escalofriantes que te obligarán a dormir con la luz de la mesilla encendida.
El primer relato presentado Willa, coincide también con el primero que escribió para este libro. Algo que se nota, puesto que el inicio de la historia es algo confuso, como si acabáramos de entrar en una sala de proyección a mitad de película.
Aún así es un relato bastante bueno, aunque no excelente, pero sí es un buen tentempié para lo que nos proporcionará este recopilatorio.
El segundo, titulado La chica de pan de jengibre, es un relato algo más largo y uno de los que más me gustaron. Trata de la huída y el enfrentamiento. Hay ocasiones en las que la única solución que encontramos es luchar, no se puede huir eternamente.
El sueño de Harvey es un relato escalofriante, angustioso y triste con final abierto, pero creo que no es necesario que nos diga lo que ocurrirá. Un claro ejemplo de que el terror más profundo es también el más humano.
Pensé que con Área de descanso tocaría otro tema, pero en esta ocasión se trata de una historia mucho más simple sobre la decisión de un hombre para hacer el bien. Se me hizo algo aburrido y esperaba un final distinto, más agresivo.
La bicicleta estática es otro relato más largo y el tema tratado es algo ligeramente surrealista, pero con un fin: cuidarnos más, porque nuestro cuerpo tiene unos obreros a los que hay que darle la faena justa.
El siguiente relato, Las cosas que se dejaron atrás, toca el tema del 11-S desde otro punto de vista distinto al ya acostumbrado, otorgándole un toque sobrenatural y dramático que no me esperaba para nada. Me gustó bastante
Tarde de graduación es el único relato que me dejó completamente indiferente. Digo, el autor nos presenta una fiesta de graduación en casa del novio de la protagonista y sucede algo que acaba abruptamente con las esperanzas de todos y también con el relato. Supongo que tras esta historia se oculta una suerte de fábula pero no la he captado, así que de ahí lo de dejarme indiferente.
N. es el tercer relato más largo que nos encontramos en este recopilatorio y es uno de los que más dudas me ha dejado, al tiempo que me ha mantenido enganchada a cada palabra y cada posible pista que nos fuera dando el autor sobre todo lo que está sucediendo.
Se trata de una historia con tintes Lovecraftianos aderezado con un trastorno obsesivo compulsivo que hace de la historia una delicia. No me importaría que compraran los derechos para hacer una película.
El gato del infierno,Mientras iba leyendo la historia a mi mente acudía una película de los 90s y que trataba exactamente de lo mismo. Y es que esta historia es el "bonus track" del libro, ya que se trata de un relato que King escribió hace unos cuantos años y cuyos derechos se compraron para hacer la película de la que les hablo. Es una historia escalofriante y espeluznante como poco, sobretodo con ese final.
Con The New York Times a un precio de ganga el autor nos muestra una historia en la que la ironía es el punto final de la misma. Conexión telefónica con el más allá y la oportunidad de decir un par de cosas a esa persona que perdiste.
Mudo te dejará como el título al finalizar la historia. Sin duda un muy buen tema y un giro a la típica historia de autoestopistas.
El relato de Ayana me recordó un poco a La Milla Verde, por la temática no por la historia en sí. Pero no es de los que más me gustaron, aunque sin duda tiene su punto.
Y por último tenemos un relato más largo que los demás, un relato que te mantendrá en vilo hasta el final y te hará ver los retretes móviles de otra manera. Se trata de Un lugar muy estrecho, una historia de venganza pura, con sus dosis de humor negro y una narración angustiosa de la que no podrás apartar la mirada. Sin duda, para mí, una de las joyas de la corona.
El primer relato presentado Willa, coincide también con el primero que escribió para este libro. Algo que se nota, puesto que el inicio de la historia es algo confuso, como si acabáramos de entrar en una sala de proyección a mitad de película.
Aún así es un relato bastante bueno, aunque no excelente, pero sí es un buen tentempié para lo que nos proporcionará este recopilatorio.
El segundo, titulado La chica de pan de jengibre, es un relato algo más largo y uno de los que más me gustaron. Trata de la huída y el enfrentamiento. Hay ocasiones en las que la única solución que encontramos es luchar, no se puede huir eternamente.
El sueño de Harvey es un relato escalofriante, angustioso y triste con final abierto, pero creo que no es necesario que nos diga lo que ocurrirá. Un claro ejemplo de que el terror más profundo es también el más humano.
Pensé que con Área de descanso tocaría otro tema, pero en esta ocasión se trata de una historia mucho más simple sobre la decisión de un hombre para hacer el bien. Se me hizo algo aburrido y esperaba un final distinto, más agresivo.
La bicicleta estática es otro relato más largo y el tema tratado es algo ligeramente surrealista, pero con un fin: cuidarnos más, porque nuestro cuerpo tiene unos obreros a los que hay que darle la faena justa.
El siguiente relato, Las cosas que se dejaron atrás, toca el tema del 11-S desde otro punto de vista distinto al ya acostumbrado, otorgándole un toque sobrenatural y dramático que no me esperaba para nada. Me gustó bastante
Tarde de graduación es el único relato que me dejó completamente indiferente. Digo, el autor nos presenta una fiesta de graduación en casa del novio de la protagonista y sucede algo que acaba abruptamente con las esperanzas de todos y también con el relato. Supongo que tras esta historia se oculta una suerte de fábula pero no la he captado, así que de ahí lo de dejarme indiferente.
N. es el tercer relato más largo que nos encontramos en este recopilatorio y es uno de los que más dudas me ha dejado, al tiempo que me ha mantenido enganchada a cada palabra y cada posible pista que nos fuera dando el autor sobre todo lo que está sucediendo.
Se trata de una historia con tintes Lovecraftianos aderezado con un trastorno obsesivo compulsivo que hace de la historia una delicia. No me importaría que compraran los derechos para hacer una película.
El gato del infierno,Mientras iba leyendo la historia a mi mente acudía una película de los 90s y que trataba exactamente de lo mismo. Y es que esta historia es el "bonus track" del libro, ya que se trata de un relato que King escribió hace unos cuantos años y cuyos derechos se compraron para hacer la película de la que les hablo. Es una historia escalofriante y espeluznante como poco, sobretodo con ese final.
Con The New York Times a un precio de ganga el autor nos muestra una historia en la que la ironía es el punto final de la misma. Conexión telefónica con el más allá y la oportunidad de decir un par de cosas a esa persona que perdiste.
Mudo te dejará como el título al finalizar la historia. Sin duda un muy buen tema y un giro a la típica historia de autoestopistas.
El relato de Ayana me recordó un poco a La Milla Verde, por la temática no por la historia en sí. Pero no es de los que más me gustaron, aunque sin duda tiene su punto.
Y por último tenemos un relato más largo que los demás, un relato que te mantendrá en vilo hasta el final y te hará ver los retretes móviles de otra manera. Se trata de Un lugar muy estrecho, una historia de venganza pura, con sus dosis de humor negro y una narración angustiosa de la que no podrás apartar la mirada. Sin duda, para mí, una de las joyas de la corona.
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