Mackenzie Phillips comparte "un vistazo crudo" a su batalla de toda la vida con demonios personales y adicciones casi fatales, y revela la verdad demoledora detrás de su compleja, secreta y dañina historia con su padre, el legendario John Phillips de The Mamas & the Papas.
No mucho antes de cumplir 50 años, Mackenzie Phillips apareció en los titulares con su arresto por posesión de drogas en el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles; la actriz, música y madre se dirigía a una reunión de One Day at a Time, la comedia de situación enormemente popular de los años 70 en la que una vez interpretó a la adorable rebelde Julie Cooper.
Nacida en la realeza del rock and roll, volando en Learjets a las Islas Vírgenes a los cinco años, haciendo brownies de marihuana con Donovan a los once, Mackenzie creció en un reino de acceso total de libertad hippie y heroína cool. Como una estrella de Hollywood en ascenso, se unió a la fiesta sin parar en la cúpula de placer hedonista creada por su padre, y una audiencia de televisión absorta vio cómo Julie Cooper se consumía ante sus ojos. Cuando Mackenzie descubrió cuán profundo y oscuro estaba siendo el viaje de su padre, ya era demasiado tarde.
Como adulta, ha pagado un alto precio por una vida de excesos, trabajando incansablemente para reconciliar su pasado maravilloso y terrible y la atracción de su padre magnético. Al compartir su viaje hacia la redención y la paz, la estrella que apareció en High on Arrival finalmente ha regresado a la tierra para quedarse.
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