El protagonista de la novela es Kevin Parson, de 28 años, quien 3 años antes ingresó en un seminario bíblico dando un giro completo a su vida. Kevin se encuentra obsesionado con el mal y comienza la novela con una interesante conversación con el Dr. John Francis, decano de asuntos académicos del seminario.Las preguntas de Kevin será premonitorios de las situaciones que se producirán a lo largo de la novela, “¿escoge el hombre simplemente el mal, o lo crea?”, “¿es la maldad una fuerza que nada en sangre humana, luchando por hallar su camino hacia el corazón, o es una posibilidad externa en espera de ser formada?”
El protagonista creía haber dejado atrás viejos demonios y dado comienzo a una vida nueva, pero una llamada de teléfono le devolverá a una terrible realidad. Se encuentra conduciendo cuando recibe una llamada en el móvil de un hombre que dice llamarse Richard Slater, “Vamos a jugar a un jueguecito, Kevin. Tienes exactamente tres minutos para confesar tu pecado al mundo. Si te niegas, el coche que llevas saltará por los aires?”. Para evitarlo, debe confesar un pecado que no sabe cuál es o resolver un acertijo.
La amenaza de Slater se cumple, comenzado así un juego cruel y macabro, en el que Kevin tendrá que ir resolviendo una serie de acertijos hasta que descubra cuál es el pecado y lo confiese públicamente. En caso de no hacerlo, el asesino amenaza con seguir cometiendo atentados.
Las claves pueden estar en su traumática infancia con episodios oscuros que tendrá que reconstruir para intentar descubrir el pecado al que Slater se refiere. Para encontrar a Slater y detener el juego contará con la ayuda de Samantha, antigua amiga y amor platónico, agente del CBI, la oficina Californiana de Investigaciones. El FBI también se muestra interesado en el caso, ya que Slater podría ser el Asesino de las Adivinanzas, al que llevan varios meses persiguiendo. La agente Jennifer Peters, una piscóloga forense de gran prestigio, será la encargada de cazarlo, algo que la obsesiona ya que el criminal mató a su hermano y ella se siente culpable.
La investigación será complicada, la trama dará varios giros, con un baile de sospechosos que podrían estar detrás de un asesino que parece estar obsesionado con el número tres, “tres minutos, tres llamadas, tres reglas, una adivinanza con tres partes, tres meses”.
La historia situará a los protagonistas en situaciones límites y nos invita a reflexionar sobre la naturaleza del ser humano y la maldad que anida en nuestro corazón, ante la que podemos adoptar dos aptitudes, reconocerla y enfrentarla o intentar ocultarla, actuando de forma hipócrita. ¿Qué consecuencias tiene cada una de las opciones? En la novela tienes la respuesta…