El libro empieza con una breve historia de los alimentos afrodisíacos, acompañados por anécdotas familiares y historicos muy irónicas y poco a poco se convierte en un viaje a través del gusto y de la cocina, que culmina en un fascinante recetario de Panchita Llona (madre de Isabel) y Carmen Balcells (su agente), hecho por recetas afrodisíacas pero simples para hacer.
También se incluye un prontuario sobre los poderes afrodisíacos de carnes, frutas y verduras, hierbas y especias, flores, sin faltar los eróticos y hechizantes efectos de la música árabe y mucho más. Pero la autora señala que algunos afrodisíacos “se basan en principios científicos, pero la mayoría actúa gracias al impulso de la imaginación … “.
El libro contiene una colección de ilustraciones de Robert Shekter que recuerdan imagenes oniricas y de tierras lejanas.
Me arrepiento de los platos deliciosos rechazados por vanidad, tanto como lamento las ocasiones de hacer el amor que he dejado pasar por ocuparme de tareas pendientes o por virtud puritana ya que la sexualidad es un componente de la buena salud, inspira la creación y es parte del camino del alma. . .Por desgracia, me demoré treinta años en descubrirlo