Este es el libro de los verdaderos malditos bastardos de la Segunda Guerra Mundial. De la América profunda al Nido del Águila de Hitler: el pelotón de paracaidistas de combate más legendario de la 101.ª Aerotransportada.
Quentin Tarantino se inspiró en ellos para su película Malditos bastardos, protagonizada por Brad Pitt y Christoph Waltz, así como Robert Aldrich lo hizo para rodar el clásico Doce del patíbulo. Sin embargo, la realidad a veces supera la ficción.
La división de los Filthy Thirteen fue la punta de lanza del ejército norteamericano en la invasión de Europa durante la Segunda Guerra Mundial. Sucios, duros, agresivos y anárquicos. Así describen a estos soldados, que ganaron fama gracias a sus excéntricas costumbres y a la crueldad con la que trataban al enemigo.
Los paracaidistas forman las unidades más duras y agresivas contra las tropas alemanas, y entre ellos destacaron por su dureza y agresividad los miembros de la sección de demolición y sabotaje del 506.º Regimiento Paracaidistas. Un grupo de soldados indisciplinados y pendencieros en el cuartel que demostraron sobre el terreno las cualidades de los mejores guerreros: valor, adaptación, intuición y moral.
Jake McNiece fue líder y alma de Los trece Malditos Bastardos, un hombre regio que, hasta su muerte, a los 93 años, bromeó con cuántas veces había sido degradado por el Tribunal Militar, sin descuidar la crudeza de aquella guerra: “La guerra es la guerra, un infierno, estás allí para matar enemigos”. Estas son sus memorias. Esta es la historia de los trece soldados que formaron el mejor pelotón de combate del ejército norteamericano.
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