Conoces la mecánica de los pensamientos; te das cuenta de cómo juzgar a una persona y te haces dueño de las palabras; decir no es lo mismo que callar. Entiendes, pues, por qué no siempre la vida sale bien; confirmas la realidad de tu vida en la literatura: la distancia entre lo que está sometido al tiempo de la muerte y lo imaginario.
Prodigio de construcción narrativa, de estrategia, de sutileza y de talento, estos textos fragmentarios de Ricardo Garibay retratan a treinta y cinco mujeres extraviadas por la vida. Treinta y cinco encuentros que tienen por protagonistas a mujeres de las clases sociales, los hábitos, las necesidades y circunstancias más diversos. Los ruidos de un presente en las sombras alargadas del ejercicio memorioso para cantar la libertad para amar y desamar, enamorarse, para hacerse y des-hacerse ellas mismas, las protagonistas.