Seth Borders tiene uno de los coeficientes intelectuales más altos del mundo. Ahora de pronto es atacado por un poder increíble, la habilidad de ver múltiples futuros posibles, y se encuentra con Miriam, una hermosa princesa de Arabia Saudita que se ha escapado de un matrimonio forzado. Las culturas colisionan cuando Seth y Miriam son lanzados juntos y obligados a huir de fuerzas decididas a secuestrar o matar a Miriam. Una historia intoxicante desarrollada en medio de las arenas movedizas del Medio Oriente y los caminos escondidos de Estados Unidos, En un instante toca temas tan antiguos como la tierra misma... y tan actuales como los titulares de primera plana de hoy en día.
“Las religiones del mundo se habían comprometido en una lucha. Una lucha entre quienes querían arreglar el mundo a punta de espada y quienes querían arreglarlo con amor”
Normalmente no soy de leer este tipo de historias: un chico conoce a una chica que pertenece a otra cultura y etc, etc. Pero cuando a esta simple historia le meten que el chico puede ver más de un futuro… ¿A que si suena más interesante? Pues así es Seth, una de las mentes más brillantes que ha tenido la humanidad, ha nacido también con un pequeño don que no se desarrolló hasta que era bastante mayor. Al conocer a Miriam, una princesa de Arabia Saudí que está huyendo de casa para no casarse con un hombre que no ama, Seth comienza a tener visiones sobre el futuro. Pero no es como todos, pues Seth tiene la capacidad de ver más de un futuro posible y de entre ellos escoger cual le conviene más. Es así como se alía con Miriam para salvarla de las garras de un futuro que solo le traerá dolor y muerte.
Cuando comenzó toda la historia todo me resulto demasiado plano, como que sentía que la historia no iba a dar más de lo que esperaba, la narración en un principio me estuvo moliendo el alma, pero de cierta parte en adelante cambio, me atrapo completamente en la historia y no quise detenerme hasta que hubo terminado la última página. Si bien el final no estuvo tan mal, no fue lo que me hubiera gustado leer, esperaba algo de más… ¿acción? ¿Romance? No lo sé, el fina del libro no termino de llenarme. El autor planteo todo bastante bien, no tiene mucha paja y eso le da un punto bastante bueno, pero lo que fue el principio y el final, fueron bastante planos.
“A Miriam se le ocurrió que Seth estaba viéndole el corazón. No podía leerle la mente, pero veía lo que ella podría decir en la próxima media hora. Eso basto para suavizarle la carga”
Si hubo algo me gusto de esta historia fueron sus protagonistas. No son los típicos protagonistas que luego de aliarse por cosas del destino se enamoran tan pronto el uno del otro, que toda la historia se basa en ellos sufriendo por su próxima separación. NO. Aquí los protagonistas no hacen todo un drama romántico, al contrario; forjan una amistad tan sólida que son capaces de todo para salvarse el uno al otro, jamás intentan ser una copia barata de Romeo y Julieta, saben perfectamente que primero tienen que librarse de la persecución y ya después la vida dirá que sucederá.
Seth me pareció extremadamente bueno para ser real, pero es humano y comete errores y aprende de ellos a lo largo de la historia, es sencillo y utiliza aquella inteligencia que la vida le dio para ayudar; no creo tener muchas quejas sobre este chico, pues me enamore de él y sufrí bastante con sus pensamientos. En cuanto a Miriam, bueno, yo adoro a las protagonistas valientes, que se lanzan a los leones en lugar de estar esperando por alguien que las salve y Miriam fue un vivo ejemplo de esto, jamás se rindió y siguió luchando por su libertad, por ser una mujer.
Amo estas historias, con toques de realidad y de fantasía, con toques de romance y de acción, disfrute mucho la lectura de este libro, lo recomiendo ampliamente a aquellos que les gusten estas historias. Aunque la narración le quite unos cuantos puntos, el final no haya sido lo que esperaba y de pronto el autor metiera cosas que ni al caso, este libro es bastante agradable.
Cuando se trata de relaciones, el tipo de Colin Singleton son las chicas llamadas Katherine. Y cuando se trata de chicas llamadas Katherine, Colin siempre termina siendo al que cortan. Diecinueve veces, para ser exactos. 
